LA HIGIENE Y MANTENIMIENTO DE LOS IMPLANTES DENTALES ES ESENCIAL PARA SU ÉXITO A LARGO PLAZO

 

 

Aunque evidentemente un implante no va a sufrir caries ni el dolor de una pulpitis, si que sigue teniendo unos tejidos de soporte que pueden estar afectados y que es necesario mantener y cuidar para evitar la aparición de problemas periimplantarios.

Sus implantes dentales requieren un control periódico por su dentista para asegurar que las encías y el hueso que los rodea se mantiene y es saludable. Esto requiere radiografías periódicas para evaluar el nivel óseo alrededor de sus implantes.

No es raro que los tornillos que unen sus prótesis a los implantes o los pilares puedan aflojarse de vez en cuando. Esto generalmente implica la retirada de la prótesis, la limpieza y su sustitución por nuevos tornillos o volver a apretarlos. Del mismo modo, si su prótesis está cementada al implante en vez de atornillada, también pueden llegar a despegarse. Si esto sucede, el dentista tendrá que retirar la prótesis, limpiarla, asegurarse de que el diseñado es apropiado y se re-cementará sobre el implante. Si bien estos son complicaciones menores, estos inconvenientes, no deben ser ignorados. Permitir que la prótesis se mantenga en boca cuando no está correctamente conectado al implante o tiene movilidad puede crear problemas más significativos más adelante.

En cuanto a la higiene , ésta debe ser escrupulosa, tres veces al día después de las comidas, con una buena técnica de cepillado, el uso de seda dental para limpiar los espacios interproximales (o cepillos interdentales) y no olvidar limpiar la lengua. Además, si su odontólogo lo considera oportuno puede ser beneficioso el empleo de enjuagues o colutorios bucales.

 

 

 

 

 

 

 

Dependiendo del tipo de prótesis que porte el paciente puede que sea necesario otro tipo de instrumental de higiene, como el irrigador o cepillos dentales con formas específicas que se adaptan mejor al tipo de prótesis.

ATENCIÓN: Siempre que aparezca una molestia en las encías, debe solicitar cita, aunque al principio, como estas molestias son normales, puede esperar cuatro o cinco días. Si transcurrido este tiempo no hubieran desaparecido, o si empeoran con el paso de los días, o fueran importantes, adviertanoslo y pídanos cita inmediatamente. Si surge algún problema, no intente resolverlo Ud. mismo: Solicite cita a su dentista.